Hoy es el cumplemes de Carolina: 1 AÑITO Y MEDIO!! Tu hijo de 18 meses

Cambios en tu niño

Cuerpo y mente
Puede que este mes observes un aceleramiento en el desarrollo físico de tu niño. Tu nene ya se siente más seguro al andar, le encanta subirse a los muebles y consigue lanzar una pelota para arriba. También es capaz de registrar en su memoria la imagen clara de un objeto, aunque no lo tenga delante de él. Aprovecha esta nueva habilidad de tu pequeño y juega a las escondidas con su juguete favorito.

Habrá días en que toda esa energía y actividad física sean demasiado para ti. En lugar de resistirte — a fin de cuentas, no hay nada que puedas hacer para disminuir su vitalidad — pon una música divertida, coge a tu pequeñín ¡e inventaros juntos nuevos pasos de baile!

Preferencia por mamá o papá
Si no te ha pasado todavía, muy pronto te pasará. Un día eres la mejor amiga de tu niño y al día siguiente te rechaza y sólo quiere a su papá, o viceversa. Aunque te hiera un poco su actitud, no te lo tomes a pecho. Los niños pequeños ignoran a uno de sus papás y favorecen al otro sin ningún motivo aparente. Por ejemplo, sólo papá puede peinarle, o quiere que sea siempre mamá quien lo meta a la cama todas las noches.

A veces este favoritismo empieza después de un viaje de negocios o un período de separación. Su rechazo es su forma de decirte "no me gusta que hagas eso". No le des demasiada importancia ni insistas en que tu niño "haga las paces" contigo. Tampoco es bueno que hagas de todo para recuperar su afecto, comprándole regalos o permitiéndole hacer cosas que normalmente no le dejas hacer. Esta clase de compensación sólo sirve para sentar malos precedentes.

Lo mejor que puedes hacer es esperar a que la fase de favoritismo se termine naturalmente. Cuando menos te lo esperes, a tu niño se le habrá olvidado completamente.
Fuente: http://www.babycenter.es/stages/2800?scid=es_es_mbtw_toddler_post18m0w

Consejos de papás y mamás: jugar a vestirse

Hacemos que de verdad nuestro hijo participe en todos los aspectos de vestirse. Le vamos diciendo que tiene que meter primero la cabeza, luego le decimos que encuentre los agujeros para los brazos. '¿Donde están tus manos? ¡Mira, ahí están! Ahora encuentra los agujeros para los pies. Ahora la cremallera.' y así. Es como un juego, y nuestra hija siente que sabe vestirse él solito.